Hace poco platicaba con unos colegas de recursos humanos, y comentábamos cómo ahora los candidatos se ofenden o enojan cuando se les mencionan los salarios para ciertos puestos directivos o gerenciales en algunas empresas, tanto grandes como pequeñas, locales e internacionales. Todos estuvimos de acuerdo en lo siguiente:
Un puesto no equivale a un salario; un salario equivale al nivel de conocimiento que tiene la persona que se está contratando.
Un puesto no tiene un precio fijo, ya que hay muchas aristas que contribuyen a esto. En el caso de la hotelería, por ejemplo, no todos los gerentes generales, chefs, capitanes o agentes de Front Desk deben ganar lo mismo. ¿Por qué? Porque se tiene que tomar en cuenta lo siguiente:
El conocimiento.
Los resultados demostrados en sus trabajos anteriores.
El nivel de responsabilidad que se les pide en la empresa contratante.
Lo que aportan a la mesa.
La facilidad que tienen para tomar decisiones y la responsabilidad de su puesto.
El tamaño de la empresa, las ventas/ingresos y muchos otros factores más.
Más que un título, importa el valor y la claridad de tus logros es lo que define tu valor
Decir que un salario para un puesto es muy alto o muy bajo omite toda una serie de factores importantísimos a considerar. Es fundamental no cerrarse a las oportunidades que se presentan. El salario es una inversión del empleador. Es decir, si se paga 1, el empleado debe generar por lo menos 2. Para mayores salarios, mayor es lo que debe generar.
Si como profesional no tienes claros los resultados tangibles que has dejado para una empresa, es importante empezar a cuestionarte si realmente el sueldo que esperas es el que debes recibir. ¿Cuánto subiste las ventas? ¿Cuánto bajaste los costos y gastos? ¿Cuál fue la rotación del personal? ¿Cuál fue tu calificación en TripAdvisor? Incluso como mesero o agente de ventas, es importante saber qué posición ocupas en ventas vs. tus colegas, y qué porcentaje de éstas generas solo.
Estos puntos son cruciales, y entre más información tengas sobre tus logros, mayores oportunidades tendrás. Si no tienes claridad en esto, no puedes exigir que se te pague más, porque, de inicio, quiere decir que no entiendes bien tus funciones y, sobre todo, tu puesto.
Hay empresas que deciden contratar un perfil con menor conocimiento a cambio de darle la oportunidad de aprender en esa empresa y demostrar sus capacidades. La empresa funge como escuela, sabiendo que probablemente pueda perder; ese es un riesgo que la empresa decide tomar a favor de un candidato que parece tener potencial y que aún no lo ha podido comprobar.
Por otro lado, hay empresas que no pueden tomar el riesgo de contratar a candidatos que no tienen el conocimiento necesario y optan por invertir en perfiles mucho más calificados. Ambas decisiones son correctas y funcionan. Lo importante es saber, como empleado, en dónde estás parado (siendo completamente honesto contigo mismo) y entender que hay todo tipo de salarios para todo tipo de perfiles y que no aplica el "One size fits all".
Es vital que como candidatos nos mantengamos realistas sobre nuestras expectativas salariales y entendamos que un salario justo refleja no solo el puesto que ocupamos, sino el valor que aportamos a la empresa. Tener los pies en la tierra nos permitirá aprovechar mejor las oportunidades y crecer profesionalmente de manera sostenible y significativa.
Gracias por confiar en mi y leerme, FP.
Comments